Ayer, se otorgó una orden de restricción temporal que detiene la subasta de la propiedad ubicada en Memphis, Tennessee, apenas unos días antes de la fecha programada. Esta subasta había sido planeada porque la anterior propietaria, Lisa Marie Presley, supuestamente no pagó un préstamo de 3.8 millones de dólares obtenido en 2018.
Riley Keough, nieta de Elvis y actual heredera de Graceland, sostiene que Lisa Marie nunca solicitó dicho préstamo ni entregó una escritura de fideicomiso a Naussany Investments, argumentando que los documentos son fraudulentos. Keough, quien se convirtió en la única administradora de Graceland tras la muerte de Lisa Marie en enero de 2023, tuvo que enfrentar una batalla legal para heredar el patrimonio. Su abuela, Priscilla Presley, había cuestionado la autenticidad del testamento de su hija.
Para resolver la disputa, Keough acordó pagar más de 1 millón de dólares a Priscilla y cubrir 400 mil dólares en honorarios legales.
Graceland, además de ser una atracción turística icónica, es también el lugar de descanso final de Elvis Presley, su hija Lisa Marie, y su nieto Benjamin Keough, así como de los padres de Elvis, Vernon y Gladys Presley. Tras su muerte, Priscilla también será enterrada junto a Elvis, una solicitud que inicialmente fue denegada pero que finalmente se concedió.
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La subasta, programada para llevarse a cabo en las escaleras del juzgado del condado de Shelby, está ahora en suspenso mientras la familia de Presley lucha por mantener el control de esta emblemática propiedad.